Mar Dulce
Una
feroz tormenta se abatió sobre Allende, las olas alcanzaban los quince metros
de altura. En una barcaza estaban Mar y Javier, a quienes los arrojo al mar. Ya
sumergidos se notaron extraños, pues Javier estaba de pie, después de haber
permanecido 20 años en silla de ruedas. Y Mar podía describir con el mínimo
detalle, las bellezas que la naturaleza escondía, por la ceguera que tenía
desde su niñez.
--Pareciera
que habitáramos otro cuerpo! -- le dijo Mar gritando
--Si
esto es fantástico! –Tantas veces lo soñé, lo imagine…que hasta me da miedo –Le
respondió Javier preso de sensaciones ambiguas, mientras daba saltos.
Mira!
estoy de pie frente a ti y es de verdad! Le dice él mientras la abraza.
A
lo que ella responde con una mirada que parece eterna. Lo que produce un poco
de extrañeza en el. Y le dice –Ahora ya no te gusto mas verdad? –Mar se ríe… y
le dice –Me quede prendida en tus ojos porque ahí está la verdad y lo verdadero
de tu amor y de nuestro amor. Ella le da un beso en la frente, y descubre otra
cosa asombrosa. El sabor de agua! Coloca en su mano y bebe un poco de esa agua
confirmando su sensación…Es AGUA DULCE!
--Javi,
Javi no lo has notado? –Que cosa? –El mar? –Que tiene? –El agua es dulce, es un
mar de agua dulce…un MAR DULCE!
Mar
y Javier piensan sobre lo que les pasa y dicen al respecto:
--No
sé si esto es la realidad o solo un sueño? Pero si tener en claro de que
terminara. Y solo hay que disfrutar de este momento, abrir nuestra memoria y
guardar, para que reproduzca el recuerdo que juntos tuvimos la posibilidad de
cumplir nuestro deseo, de que pudieras ver y yo caminar. Y ya no importa si yo
vuelvo al cuerpo, de la parálisis y tú a la oscuridad, lo importante es seguir
viviendo, por este amor que nunca morirá.
FIN
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